La Luz de Cristo: Iluminando nuestro andar
En el corazón del libro de Efesios, encontramos un pasaje que nos llama a vivir una vida transformada por la gracia de Dios. En Efesios 5:10-11, Pablo nos exhorta a examinar nuestra manera de vivir y a buscar la luz de Cristo para guiarnos en nuestro andar diario: "Probad lo que es agradable al Señor." Estas palabras nos invitan a una profunda reflexión, a un análisis de nuestros pensamientos, palabras y acciones, para determinar si están alineados con la voluntad de Dios. ¿Cómo podemos saber qué es agradable al Señor? ¿Cómo podemos vivir una vida que refleje la luz de Cristo?
Comprobar nuestras motivaciones
El primer paso para discernir lo que es agradable al Señor es "probar" nuestros motivos. No se trata de una prueba superficial, sino de un examen profundo de nuestro corazón. ¿Cuáles son nuestras verdaderas razones para hacer las cosas? ¿Estamos motivados por el egoísmo, por la búsqueda de aprobación humana, o por el deseo de agradar a Dios? A menudo, nuestras acciones están impulsadas por deseos egoístas que nos alejan de la voluntad de Dios. Tal vez buscamos la aprobación de los demás, tratando de impresionar a la gente con nuestras habilidades o posesiones. O quizás nos dejamos llevar por la codicia, buscando satisfacer nuestros propios deseos sin considerar las necesidades de los demás.
La Biblia nos recuerda que Dios conoce nuestros corazones: "Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de doble filo; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón." (Hebreos 4:12). Él ve nuestras motivaciones más profundas. Es por eso que es crucial pedirle sabiduría y discernimiento para identificar nuestros deseos egoístas y reemplazarlos por una actitud de amor, servicio y obediencia a su voluntad.
Vivir en la luz de Cristo
La luz de Cristo es un faro que nos guía en nuestro camino. Pablo nos dice que no participemos en las obras infructuosas de las tinieblas: "No participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas." (Efesios 5:11). La luz de Cristo nos revela las obras de las tinieblas y nos da la fuerza para resistirlas. Estas obras pueden ser el odio, la envidia, la mentira, la fornicación, la avaricia, la violencia y la idolatría.
Vivir en la luz de Cristo significa ser transformados por su gracia. "Porque vosotros erais en otro tiempo tinieblas, pero ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz" (Efesios 5:8). La luz de Cristo nos da la capacidad de ver el mundo con nuevos ojos. Nos permite comprender su amor y su perdón. Nos da la fuerza para resistir la tentación y para vivir una vida que refleje su gloria.
El fruto del Espíritu Santo
¿Cómo se expresa la luz de Cristo en nuestras vidas? A través del fruto del Espíritu Santo: "Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley" (Gálatas 5:22-23). Cuando permitimos que el Espíritu Santo obre en nosotros, manifestamos estas características en nuestra vida diaria.
Por ejemplo, el amor nos motiva a servir a los demás y a buscar su bienestar. El gozo nos llena de alegría y esperanza, incluso en medio de las pruebas. La paz nos da tranquilidad y armonía interior. La paciencia nos ayuda a soportar las dificultades con paciencia y comprensión. La benignidad nos impulsa a ser amables y compasivos con los demás. La bondad nos lleva a hacer el bien y a mostrar generosidad. La fe nos da confianza en Dios y en su plan para nuestras vidas. La mansedumbre nos ayuda a controlar nuestras emociones y a responder con calma a las provocaciones. La templanza nos da dominio propio y nos ayuda a resistir las tentaciones.
Un llamado a la acción
Efesios 5:10-11 no es un llamado a la culpa o al miedo, sino un llamado a la esperanza y a la transformación. Al examinar nuestras motivaciones y al vivir en la luz de Cristo, descubrimos la verdadera libertad y la verdadera alegría.
Dios nos ha dado el Espíritu Santo para guiarnos y fortalecernos en nuestro camino. Debemos pedirle sabiduría y discernimiento para discernir lo que es agradable al Señor. Debemos buscar su luz para guiarnos en nuestro andar diario. Al vivir en la luz de Cristo, experimentaremos la verdadera paz, la verdadera alegría y la verdadera libertad.
Preguntas Frecuentes sobre Efesios 5:10-11
¿Qué dice Efesios 5:10-11?
"Porque ustedes son luz en el Señor; anden como hijos de luz (11) pues el fruto del Espíritu es en toda bondad, justicia y verdad."
¿Qué significa ser "luz en el Señor"?
Significa que los cristianos deben reflejar la luz de Jesucristo en sus palabras y acciones.
¿Qué significa "andar como hijos de luz"?
Significa que los cristianos deben vivir vidas que reflejen la naturaleza de Dios, que es luz y bondad.
¿Qué significa "el fruto del Espíritu"?
Significa las características positivas que se desarrollan en la vida de un creyente cuando el Espíritu Santo está trabajando en ellos.
¿Cuáles son los frutos del Espíritu?
Los frutos del Espíritu son: bondad, justicia y verdad.