La búsqueda de una iglesia: Razones equivocadas para cambiar de congregación

El viaje de una familia en busca de una iglesia
Wen y su familia, procedentes de la provincia de Xinjiang, emprendieron un viaje a Sichuan sin más compañía que sus propias esperanzas. Sin vehículo propio, 1400 millas los separaban de su destino por tierra, un viaje que no solo se anticipaba largo y arduo, sino también peligroso debido a la presencia de fuerzas policiales y militares. Pero, ¿qué motivaba a Wen a asumir tal riesgo?
La fe y las necesidades insatisfechas
La familia de Wen, de ferviente fe cristiana, ya no encontraba satisfacción en su iglesia local: los jóvenes no estaban comprometidos, los sermones habían perdido resonancia espiritual, la música no era del agrado de su esposa y un desacuerdo sobre la eucaristía había surgido con un diácono. Este anhelo de una experiencia de iglesia más enriquecedora los empujaba hacia lo desconocido.
Un relato ficticio con una lección real
Esta historia, aunque ficticia y satírica, refleja una realidad más suave que la de Wen, pero igualmente significativa. Los cristianos americanos, a veces, abandonan sus iglesias por razones mucho menos graves. A continuación, exploraré siete motivos inadecuados para dejar una congregación, relacionados con preferencias personales.
Razones insuficientes para abandonar una congregación
- Programas más atractivos en otra iglesia
A menudo, las familias buscan iglesias con programas mejor estructurados para los jóvenes. Sin embargo, cambiar de iglesia por esta razón ignora la importancia de la disciplina familiar y la oportunidad de contribuir al crecimiento de la congregación actual. - Ministerios no destacados
La ausencia o falta de prominencia de un ministerio no justifica la partida. Es preferible buscar maneras de apoyar o iniciar ese ministerio dentro de la iglesia existente. - Conflictos con otros miembros
Los conflictos entre miembros no deben ser causa de abandono, sino oportunidades para practicar la paciencia, el perdón y el amor mutuo que instruye el Nuevo Testamento. - La supuesta dirección del Señor
Utilizar la excusa de que "Dios me está guiando a otro lugar" sin una razón clara o propósito puede ser simplemente una justificación para seguir preferencias personales en lugar de la obediencia a Dios. - Falta de oportunidades para servir
Afirmar que no hay lugar para servir en la iglesia a menudo oculta un deseo de posiciones o títulos. En realidad, siempre hay maneras de servir dentro de la comunidad sin necesidad de un rol oficial. - Servicios o sermones poco atractivos
La actitud de ir a la iglesia solo para recibir y no para contribuir puede llevar a la insatisfacción. Prepararse para el servicio, orar y participar activamente puede cambiar esta perspectiva. - Ausencia de personas similares
En lugar de ver la falta de personas con intereses o edades similares como algo negativo, se debe valorar la diversidad como un reflejo del cielo, donde diferentes personas se unen en adoración.
Conclusión: La verdadera razón para estar en una iglesia
La decisión de dejar una iglesia no debe basarse en razones superficiales o preferencias personales. La iglesia es un lugar para servir a otros y alabar a Cristo, siguiendo su ejemplo de servicio y sacrificio.